lunes, 20 de agosto de 2007


Hoy bajaba las escaleras del metro Baquedano, y entre el tumulto de personas que subía apresurada a la combinación de línea, veo un rostro que me llama la atención, su cara de tardes interminables en plazas, si, era él, ese chico, el de perturbarme en la sala de clases pensando en él, el de que me llevaba a lugares desconocidos a caminar, que me hacia regalos, el que me regalo mi primera flor, la que se seco al lado de mi cama. Me puse nerviosa e hice que no lo veía, pero el me reconoció,
-Antonia!, hola amiga, me hice la desentendida, lo quede mirando.
-ah, hola.
-tanto tiempo niña ¿Cómo has estado?
-bien, ¿y tú?
-si, bien, haciendo mis cosas…
-¿para donde vas?
Me queda mirando con su cara coqueta de siempre.
-a mi casa, ¿y tú?
-igual, estoy cansada y necesito dormir
Recordé esa tarde que pasamos en aquella plaza, donde conversábamos temas infinitos que ya no recuerdo, pero en que lo miraba y solo esperaba en que me besara, que pendeja, pero me gustaba.
Él estaba un peldaño mas arriba que yo, él subía y yo bajaba. Mire sus pies, y comenzó a retroceder, ese sueño idiota de niña encaprichada, retrocedía subiendo los peldaños
- estoy apurado.
- entonces que estés bien, ¿te cuidas ya?
- tu igual.
Me dio la espalda y desapareció, como la atracción que tenía hacia él.

1 comentario:

froztdragon dijo...

hola poste d emi blog q nunka he usado Xd
kisas mañan escriba algo
=)
debe serbkn
bueh te cuidas saludos
=)
lindo el texto
algo predecible
adieww